La producción de pasteles industriales implica una serie de etapas altamente coordinadas, cada una de las cuales es fundamental para mantener la calidad y la eficiencia. La línea de producción puede variar ligeramente según el tipo específico de pasteles y el nivel de automatización involucrado, pero las etapas fundamentales generalmente siguen siendo consistentes en diferentes configuraciones.
1. Preparación de los ingredientes
El proceso comienza en el área de la cocina donde se preparan materias primas como harina, azúcar, huevos y otros ingredientes. En líneas totalmente automatizadas, estos ingredientes suelen medirse y mezclarse en grandes mezcladoras. La medición y mezcla precisas son esenciales para garantizar la consistencia y la calidad del producto final. Los sistemas automatizados pueden mejorar la precisión y la eficiencia, reduciendo la probabilidad de error humano.
2. Mezcla de masa
Una vez que los ingredientes estén listos, se mezclan para formar la masa del pastel. El proceso de mezclado es fundamental ya que determina la textura y consistencia del pastel. Se utilizan mezcladores industriales para conseguir una mezcla homogénea. Algunas líneas de producción utilizan mezcladores continuos que mantienen un flujo constante de masa al depositador, asegurando una tasa de producción constante.
3. Depositar la masa en moldes
Luego se deposita la masa en moldes para hornear. Esto se hace mediante depositadores automáticos que garantizan que cada molde reciba la cantidad exacta de masa necesaria. Los moldes viajan a lo largo de una cinta transportadora y pasan por debajo del depositador, que los llena con la cantidad precisa de masa. Este paso es crucial para mantener la uniformidad en el tamaño y peso del pastel.
4. Hornear
Los moldes llenos se transportan a los hornos para hornearlos. Hay dos tipos principales de hornos utilizados en producción de pasteles industriales : hornos de túnel y hornos rotativos.
Hornos de túnel: son sistemas de horneado grandes y continuos en los que los recipientes se mueven a través de un túnel largo y calentado. La temperatura y el tiempo de horneado se pueden controlar con precisión, lo que permite obtener resultados de horneado consistentes. Los hornos de túnel están altamente automatizados y requieren una mínima intervención humana.
Hornos rotativos: En los hornos rotativos, las bandejas se colocan sobre rejillas que giran dentro del horno, asegurando una distribución uniforme del calor. Estos hornos se utilizan a menudo en líneas semiautomáticas donde es necesaria la carga y descarga manual de recipientes.
El tiempo de horneado varía según el tipo y tamaño del bizcocho. Los pasteles más pequeños suelen tardar unos 20 minutos en hornearse, mientras que los pasteles más grandes pueden tardar hasta 50 minutos.
5. Enfriamiento
Después de hornear, los pasteles deben enfriarse antes de seguir procesándose. Esto se hace en transportadores de enfriamiento donde se permite que las tortas se enfríen a temperatura ambiente. Un enfriamiento adecuado es esencial para evitar la condensación dentro del embalaje, lo que puede provocar el crecimiento de moho y su deterioro.
6. Relleno y decoración
Una vez enfriados, los pasteles pueden pasar por etapas adicionales, como el relleno y la decoración. Las máquinas llenadoras automáticas pueden inyectar cremas, mermeladas u otros rellenos en los pasteles. Para pasteles decorados, se aplica glaseado u otros aderezos utilizando equipos especializados como Cake-O-Matic, que garantiza una aplicación uniforme y precisa del glaseado y otras decoraciones.
7. Cobertura de chocolate (opcional)
Algunas tartas están recubiertas de chocolate. Este proceso consiste en pasar los pasteles por una máquina bañadora de chocolate donde se cubren con una capa de chocolate derretido. Después del recubrimiento, los pasteles pasan a través de un túnel de enfriamiento a una temperatura de entre 10 y 12 °C para solidificar el chocolate sin que florezca o se blanquee, lo que garantiza un acabado brillante y atractivo.
8. Embalaje
El último paso es el embalaje. Los pasteles se envuelven automáticamente en materiales de embalaje para preservar la frescura y prolongar la vida útil. Las máquinas envasadoras pueden envasar tartas de forma individual o en grupos, según las especificaciones del producto. El proceso de embalaje también incluye la impresión de las fechas de producción y caducidad en los paquetes.
9. Control de Calidad y Almacenamiento
Durante todo el proceso de producción, existen medidas de control de calidad para garantizar que cada pastel cumpla con los estándares requeridos. Esto incluye comprobar el peso, tamaño y apariencia de los pasteles. Una vez empaquetados, los pasteles se almacenan en un ambiente controlado antes de distribuirse a los minoristas.